Manolo y Venancio se encuentran:
“¿Qué tal, Venancio? ¿Ya has armado el rompecabezas que te compraste el otro día?”
“¡Jo! No se puede, me tardaría muchísimo”.
Manolo, extrañado, le pregunta:
“¿Te tardarías mucho? ¿Y porqué?”
“Es que en la caja decía ‘de 5 años en adelante’, joder!